Venezuela impulsa Premio Nobel de la Paz para el Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias Henry Reeve.
Nosotras y nosotros Bolivarianos, Martianos, Fidelistas y profundamente Chavistas expresamos nuestro respaldo a la postulación del Premio Nobel de la Paz al Contingente Internacional de Médicas y Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias Henry Reeve, como reconocimiento a su labor altruista, humana, solidaria y su contribución de garantizar la salud y vida de los más humildes ante la situación generada por la COVID-19 en el mundo.
El Movimiento Nacional de Amistad y Solidaridad Mutua Venezuela- Cuba convoca, a los más diversos sectores de la sociedad venezolana, a adherirse a esta solicitud que hoy es un clamor universal de personalidades, movimientos e instituciones sociales, partidos políticos y millones de ciudadanos en el mundo que han recibido el cuidado amoroso y solidario de los colaboradores cubanos de salud.
En Venezuela, la colaboración médica cubana cumple funciones desde hace 17 años. Impulsa una revolución en el sector salud con la implementación de un amplio sistema de atención primaria gratuita y de calidad, establecido a lo ancho y largo de la nación. Asimismo, hizo llegar los primeros servicios médicos a los sectores más humildes de nuestro pueblo, beneficiario del desinteresado apostolado realizado por estos galenos para elevar su nivel de salubridad.
De la mano de los comandantes Fidel Castro Ruz y Hugo R Chávez Frías en el marco de la firma del convenio integral de salud Cuba-Venezuela, el 16 de abril de 2003, se estableció el Programa Misión Barrio Adentro con el objetivo de activar un plan de salud que comprendiera la atención médica preventiva y gratuita de las comunidades más excluidas, ante la nefasta herencia que convirtió la salud pública en un privilegio de pocos y sacó provecho del dolor de muchos. Este programa se expandió a los 23 estados de la nación y al Distrito Capital, creció en la medida que este Ejército de Batas Blancas se sumergía en lo más profundo de nuestro pueblo y sus resultados conllevaron a que el 12 de junio 2005 el Comandante Chávez inaugurara el programa Misión Barrio Adentro II.
En la actualidad están en funcionamiento 568 Centros de Diagnóstico Integral (CDI), 585 Salas de Rehabilitación Integral (SRI) y 35 Centros de Alta Tecnología (CAT), todos puestos al servicio del enfrentamiento de la COVID-19. Estas instalaciones y su personal están en la primera trinchera de combate al virus, preservando por sobre todas las cosas la salud y la vida de los pacientes recluidos en esos centros, donde no existen diferencias sociales, de credos, razas y afiliación política para recibir una esmerada atención.
En marzo del 2020, el Presidente Nicolás Maduro decreta la cuarentena social consciente para enfrentar la COVID-19, solicitando apoyo de especialistas médicos al gobierno de Cuba para combatir la epidemia, y en pocas horas llegaron al país 2000 colaboradores cubanos integrantes de la Brigada Internacional Henry Reeve con su larga experiencia en la atención ante desastres y graves epidemias en diversas naciones.
Las médicas y médicos recién arribados, sin sacudirse el polvo del camino, unidos a los 22 mil colaboradores de la Misión Barrio Adentro y en perfecta unión cívico militar, son quienes dan la batalla día a día realizando las pesquisas para detectar pacientes enfermos con el virus en las comunidades. Estos equipos han estado combatiendo en la línea roja al recibir en nuestras fronteras, junto a las autoridades venezolanas, a los connacionales que retornan al país con una alta carga viral.
Cuba, una pequeña isla en el mar caribe y a tan solo 90 millas de la potencia más poderosa que haya conocido la humanidad, recibe al igual que Venezuela, el más inmoral y criminal bloqueo en medio de la terrible pandemia que azota al mundo. Sin embargo, eso no ha sido impedimento para que exhiba su vocación altruista y solidaria en más de 36 naciones con el envío de 41 brigadas de salud, muy a pesar del hostigamiento permanente y la campaña de descrédito contra la colaboración médica cubana que ejerce la Casa Blanca.
En Venezuela, donde se han fundido el amor y la hermandad histórica, precedido por la visión emancipadora del Libertador de independizar la Patria del Apóstol Martí, su más grande admirador y, ratificada en la amistad imperecedera entre Fidel Castro Ruz y Hugo Chávez Frías no podían faltar las expresiones de simpatía que surgen de todos los sectores de la sociedad para acompañar desde sus distintas instancias este reconocimiento mundial, a quienes de manera humanista y voluntaria dejan a su familia y a su patria para garantizar la salud de nuestros compatriotas.
En este sentido, los exhortamos a todos ustedes, integrantes de los sectores de la sociedad nacional, académicos, intelectuales, organizaciones comunitarias, políticos, movimientos sociales y gubernamentales a sumarse con su firma y pronunciamiento a este reconocimiento internacional, que se ha convertido en un verdadero Tsunami de solidaridad para corresponder los esfuerzos realizados por los mejores hijos de la patria de José Martí.
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